¿Quién no ha soñado alguna vez de pequeño con tener una en el jardín de su casa o en el parque más cercano? Un refugio entre los árboles, un lugar secreto donde esconderse, donde jugar sin ser molestado, donde compartir meriendas con los amigos, donde contarse los primeros secretos y, por qué no, donde darse el primer beso.
Para los que hace años que dejamos la niñez, ahora hemos retomado la ilusión por tener una casa en un árbol. Un lujo no apto para muchos si no se tiene un gran jardín o una pequeña extensión de terreno en el campo, eso sí, repleta de árboles con troncos gruesos y resistentes para poder sujetar aunque sea un pequeño habitáculo....
Vía Baumraum
La idea de casa en el árbol que se tiene durante la niñez dista mucho de los lugares pensados para el relax y el descanso que se tienen de estas viviendas en el mundo adulto. Lejos de estar concebidas en madera, las hemos visto forradas de espejos donde se refleja toda la inmensidad de un bolque o la nieve tapando las montañas.
Vía Taschen
Vía Roadtripper
Vía Laurbana.com
Estos lugares están concebidos como pequeños escondites de paz que en ningún caso es necesario que sean auténticas casas con todas sus estancias. A veces, una plataforma de madera con unas colchonetas y cojines por el suelo desde donde abservar el horizonte por encima de las copas de los árboles suele ser suficiente para conformarse.
Porque, en el fondo, para eso sirven, para ver la tierra desde otra perspectiva y para alcanzar total simbiosis con la naturaleza.
A pesar de que los diseños más innovadores están dejándonos boquiabiertos con casas de cristal, de materiales metálicos o de maderas muy tratadas, el concreto original y más rústico nos sigue encantando. Tal vez por su carácter más romántico y, sobre todo, más en sintonía con la naturaleza.
Vía dailymail
Vía Thisiscolossal
Vía Dailymail
Vía Curbly
Vía Luxuryacomodations
En este post hacemos un recorrido por algunas de las que más nos han impresionado y que sabemos que te van a impresionar a ti también. Casas redondas, de materiales plásticos, dormitorios desde donde observar el mundo realmente de otra manera y que pertenecen a hoteles de ensueño.
Vía Apartmentherapy
Vía Fastcodesign
¿Te apetece subirte con nosotros a una casa de un árbol como cuando eras pequeño? Puede ser una experiencia fantástica.
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